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Gobernadores defienden a migrantes: “Las remesas son un acto de amor”

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Las remesas que millones de mexicanas y mexicanos en Estados Unidos envían a sus familias no son un lujo, son una línea de vida. Así lo expresaron de forma categórica las y los gobernadores del país agrupados en la Conferencia Nacional de Gobernadoras y Gobernadores (CONAGO)—de la cual forma parte Alejandro Armenta por Puebla—, al pronunciarse este lunes contra cualquier intento de imponer impuestos, aranceles o restricciones a estos recursos.

“Son un acto de amor”, afirmaron en el posicionamiento conjunto, liderado por la presidenta de la CONAGO, Marina del Pilar Ávila Olmeda. Para las y los mandatarios, gravar el envío de remesas no solo es económicamente irresponsable, sino también moralmente inaceptable: “Es castigar doblemente el sacrificio de quienes han dejado su tierra para dar sustento a sus familias”.

Según datos oficiales, en 2024 las remesas superaron los 63 mil millones de dólares, una cifra récord que representa una de las principales fuentes de ingresos del país. En muchas regiones, ese dinero ha sido esencial para mantener a flote economías familiares, pagar estudios, sostener pequeños negocios y atender emergencias de salud.

El pronunciamiento de la CONAGO también destaca que cualquier intento de gravamen afectaría directamente a los sectores más vulnerables y profundizaría las desigualdades. “Detrás de cada dólar enviado hay historias de separación, de trabajo extenuante, de sueños a la distancia. No se puede ver ese dinero como si fuera mercancía. Es un lazo emocional y vital con su país de origen”, sostuvieron.

La organización llamó al gobierno estadounidense a frenar cualquier propuesta en ese sentido y reconoció el trabajo de la presidenta Claudia Sheinbaum en la defensa de los derechos de la comunidad migrante. “Estaremos siempre de su lado”, se afirma categóricamente.

El planteamiento se da en medio de la creciente preocupación por las propuestas migratorias del expresidente Donald Trump, quien contempla imponer un impuesto del 5% a las remesas como parte de su agenda electoral.

“Gravar las remesas no solo es una mala política económica; es una ofensa a la dignidad de quienes sostienen desde fuera a sus familias y, en buena medida, a su país”, concluye el mensaje de la CONAGO.

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